La empresa de Nano Guerra-García tiene problemas para sacar la licencia municipal. La solución parece un acertijo imposible de resolver. Así son los obstáculos que, en muchas ocasiones, encontramos los peruanos para emprender un proyecto. Sin embargo, ni Nano ni su equipo se detienen. Siguen visitando conglomerados comerciales, en la búsqueda de emprendedores con historias valiosas y sorprendentes, que luego serán materia del programa de televisión que él conduce. Los relatos y personajes que encuentra en sus incursiones urbanas son, en realidad, lo más importante de esta historia: cómo surgir, cómo conseguir el éxito, a pesar de ir contra la corriente, es decir, a pesar de enfrentar un contexto en contra. Mientras tanto, Nano sigue buscando una solución para el conflicto con la municipalidad. ¿Por qué será que el sistema pone tantas trabas? ¿Dónde encontrar respuestas? Al inicio de esta historia, Nano recuerda a Simón, un amigo sabio que podría guiarlo en la maraña de los trámites que necesita resolver. En la búsqueda de Simón, Nano irá encontrando sus propias respuestas: ¿Qué clase de país es el Perú? ¿Hacia dónde nos llevan las leyes y el sistema imperante? ¿Cuál es el camino para que los nuevos emprendedores se muevan sin dificultades? ¿Dónde está la clave de los negocios exitosos? El problema es que el sistema tradicional, que incluye leyes, políticas y, por supuesto, a los generadores de las mismas, vive de espaldas a los emprendedores y, en lugar de facilitarles la puesta en marcha de sus proyectos, lo que hacen es obstaculizarla hasta los límites de la marginalidad y la ilegalidad.
