"La Manana es tan hermosa, tan limpia y alegre, que Eusebio decide pintar. Es acomoda los bifotes y fija un papel con cintas a una tabla. Coge los la'pices, el borrador, el sacapuntas, u se va..." El talento de Eusebio y el deseo de todos sus amigos de tener un retrato resultara'n en una graciosa obra de arte.