Buck es un perro que vive en San Diego, California. De su feliz vida como perro de casa es arrancado vilmente; así inicia un viaje que lo llevará a recorrer América del Norte, hasta llegar a los límites del círculo polar ártico. Mas el viaje de Buck es también espiritual: cuando es secuestrado y obligado a cambiar su cómoda y civilizada vida, Buck se resiste, pero a medida que el clima, el trato humano y el contexto se van volviendo más agrestes, volverá al espíritu de la manada a través de la llamada a lo primitivo que resuena en sus instintos: la llamada de lo salvaje.
Jack London (1876-1916), seudónimo de John Griffith Chaney, es uno de los grandes escritores estadounidenses de los albores del siglo XX. Su mundo se inspira en una interpretación muy subjetiva de la filosofía de Nietzsche y se construye a partir del principio de lucha por la supervivencia. Nacido en San Francisco, fue esencialmente un niño autodidacta que leía con avidez los fondos de la biblioteca pública. Con diecisiete años se embarcó en su primera goleta, rumbo a Japón. Tras varias experiencias como marinero y vagabundo -razón por la que también fue encarcelado-, London acudió a la Oakland High School y, posteriormente, a la Universidad de California, que tuvo que abandonar por problemas económicos. Como muchos, sufrió la fiebre del oro hasta que, finalmente, se dedicó a la escritura.