Estas son historias juveniles y desenfadadas, estremecidas por el electroshock de las drogas y uno que otro tema de los Rolling Stones. El editor Este libro surreal, elegante, sardónico, negro, trae por primera vez, me parece, el olor del LSD a la narración peruana. José B. Adolph El mundo que Ampuero nos narra es el de la juventud burguesa, decadente en la actualidad, sobre todo por los nuevos valores y significados que el mundo socialista y las luchas del Tercer Mundo brindan como hechos indiscutibles… Adolph ha dicho que Ampuero nos trae el olor del LSD a la narración peruana, y que ésta es la juventud del presente. Nos preguntamos: ¿es importante esto para el Perú actual? ¿Es ésta la juventud que queremos? ¿Es ésta la juventud de un país subdesarrollado o es la alienada y deformada por los engañosos símbolos y afectos de un imperialismo y capitalismo que se derrumba frente a la lucha de jóvenes y pueblos de Vietnam, Cuba, Camboya, etc.? La cuestión final será siempre en estos casos tomar posición. Y, por supuesto, la nuestra no es la de Adolph. Juan Cristóbal
Fernando Ampuero (Lima, 1949) estudió en el Club de Teatro y en la Universidad Católica de Lima. Empezó su carrera literaria en la década de los setenta con la publicación del volumen de cuentos Paren el mundo que acá me bajo (1972). Vivió en las islas Galápagos y en la selva boliviana y brasileña. En 1975 obtuvo una beca de literatura en Budapest, donde escribió la novela Miraflores melody (1979), y a su regreso a Perú, se volcó en el periodismo, tanto en prensa como en televisión. Gato encerrado (1987) recoge una selección de sus crónicas y reportajes. Entre sus obras destacan Malos modales (1994), Bicho raro (1996), Cuentos escogidos (1998) y El enano, historia de una enemistad (2001), novela que aún permanece en las listas de venta de su país, donde superó los cuarenta mil ejemplares en pocas semanas. En la actualidad es Editor General de la cadena televisiva de noticias Canal N.