A Julián le dieron una tarea: debe entrevistar a un autor. Si no fuera por su hermano, no se le habría ocurrido a quién entrevistar, pero desde que Felipe le pasó Corazón de robot, Hugo Valbier es su escritor preferido. Como está un poco desaparecido, no es fácil ubicarlo, pero esa ni siquiera es la parte más difícil. Lo más complejo es lograr que el señor Valbier le responda la entrevista, o siquiera le responda los e-mails y así poder sacarse una buena nota en su tarea y no reprobar. Sin embargo, cuando por fin logran establecer contacto, no solo conocerá en profundidad el mundo del autor, sino también la razón de por qué no ha publicado más.
