El Perú que todos queremos. La biografía de Raúl Diez Canseco Terry representa uno de esos recorridos vitales en los que, a la hora de hacer su repaso, uno halla una unidad de propósito gobernada por la coherencia y la fidelidad a sí mismo. Fue el pionero en traer a Lima las cadenas de fast-food, que llegaron para quedarse. Fue también quien, muy joven, identificó una brecha en el ámbito educativo, debido a que los estudiantes egresados de secundaria no estaban totalmente preparados para ingresar a la universidad. Así nació la Academia Preuniversitaria San Ignacio de Loyola, que tiempo después se convertiría en la Corporación Educativa San Ignacio de Loyola, primer modelo educativo de exportación en el Perú. Fue vicepresidente de la República y ministro de Comercio Exterior y Turismo entre los años 2001 y 2004, desde donde fue un gran impulsor del Tratado de Libre Comercio (TLC) y de la exportación de los productos bandera del Perú. De manera que, entre la vida pública y privada, redefiniendo no solo los términos de la relación entre sociedad y sistema educativo, sino también marcando el ritmo de los hechos económicos y políticos recientes en nuestro país, en tiempos en los que se requiere contar con una visión moderna, global y altamente competitiva, quizá sea la hora para un hombre como Raúl Diez Canseco.
